La criminología es muy importante, puesta esta materia entra en juego una vez que se ha cometido el delito, es decir en el momento de la investigación, para juntar las pruebas y así averiguar iniciar el proceso judicial y penal.
Quienes estudian esta materia se llaman criminólogos, ellos tienen conocimiento en distintas materias, como medicina y derechos, es por ello que pueden trabajar en distintos ámbitos como por ejemplo, el ámbito policial, el penitenciario, medicina forense, judicial, entre otros.
La criminología es una ciencia multidisciplinaria, ya que se auxilia de otras ciencias como la Biología, la Psicología, la Antropología y la Sociología dando origen a Antropología Criminal, la Biología Criminal, la Psicología Criminal o la Sociología Criminal, y así poder llevar a cabo su objetivo.
Se encarga del estudio de la conducta humana ya sea social o antisocial, que pueden ser catalogados o no como delitos dentro del marco jurídico penal, así como comportamientos delictivos; de igual manera estudia al delito, el delincuente, la víctima y la conducta criminal, para intentar dar una explicación las causas y motivos que llevan a alguien a delinquir, así como maneras de prevenir las conductas delictivas.
El objeto de estudio es lo que diferencia a la Criminología de otras disciplinas como el Derecho Penal, la Medicina Forense, la Criminalística, la Penología o el Derecho Penitenciario.
Cesare Lombroso es considerado el padre de la criminología, fue un médico y criminólogo italiano que revolucionaría la sociedad de finales del siglo XIX, quien también es reconocido como el precursor de la Antropología Criminológica.
Lombroso decía que el delito era el resultado de una serie de tendencias innatas del sujeto, de tipo genético, que podían observarse en ciertos rasgos físicos y fisionómicos de los delincuentes habituales (asimetrías craneales, determinadas formas de mandíbula, orejas, arcos superciliares, etc.).
